Una noche más que paso en vela, con pensamientos recónditos viajando a una velocidad ignota. Anhelo el sosiego del mar, de la salina golpeando los arrecifes y los muros carcomidos por el tiempo y la historia. Me adentro en las calles desahuciadas de esta ciudad suburbana azotada por un clima nocturno poco común. Mi cajetilla de cigarrillos se ve extenuada por este vicio bohémico que me ha atacado, y mi taza de té lentamente va feneciendo a cada sorbo. Camino estas calles desiertas a una hora no rutinaria y el deseo de observar un cielo estrellado se ve obstruido por la inmunda contaminación luminaria que invade estos caminos. Si tan sólo me encontrase a un alma gemela sufriendo de este mismo mal? Si tan sólo apareciese un ser humano transitando en esta pesadilla de insomnio? O tal vez un individuo sonámbulo que me alegrara con las absurdidades de su mundo presuntuoso. Nadie da señales de vida. Nadie brinda placidez a esta mente que se retuerce entre pensamientos y especulaciones. Sigo en esta jornada, peregrinando solo en esta noche fría. Retornaré a mis aposentos cuando el cuerpo me lo pida.
Alberto R. Tornes
2009
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
1 comment:
Vampiroooooo!
es un gusto leerte! tus letras tienen fuerza y voz propia, me gustaria leer algo mas espontaneo y menos premeditado? mm no se, mientras, voy por mi gran toalla para cuello jajaja Sigue escribiendo eh! (:
.JADE.
Post a Comment